Un mal buen día.

Es en momentos como este, en los que me doy cuenta de lo mucho que he avanzado, y en los que recuerdo palabras pronunciadas por mi amada. Hace un tiempo ella me dijo "hoy me encuentro mal, aunque lo suelte no pasará nada, porque no es porque yo quiera, sinó porque mi cuerpo está mal", bueno, las palabras no son exactas, es más, sé que no lo dijo así, pero el significado es lo que importa. Hoy mi día comienza terrible, porque me siento muy mal del estómago y tengo ganas de, bueno, no diré la palabra, no porque me de miedo, sinó porque es desagradable ;-)

Pero, a diferencia de lo que me sucedía hace un tiempo, hoy lo considero como algo bueno. Recuerdo sus palabras, y pienso que aunque hoy descargase mi estómago, no lo haría por tristeza, soledad, depresión, sinó que lo haría porque mi pobre estómago no quiere algo dentro. La cuenta que llevo no se detendrá hoy, mi felicidad tampoco. Por eso estoy feliz, aunque suene un poco extraño que sintiéndome horrible pueda estar feliz, pero si, por todo lo que significa para mi. Es la primera vez en muchísimos años que siento genuinas ganas de vomitar (ups, lo he dicho), y eso me alegra.

Porqué os cuento esto? porque tiene mucho que ver con nuestra relación. Mi estado actual (y no me refiero a mi estómago :-)) se lo debo en gran parte a ella. Fui yo quien decidió comenzar a tratarme, a curarme, y soy yo el que lucha todos los días, pero es ella mi apoyo, mi fuerza y mi esperanza. Fue ella quien me habló duramente cuando necesitaba justo esas palabras duras, fue ella quien me apoyó cuando no tenía a nadie y es ella la razón de mi felicidad, que ayuda a mi recuperación. Le debo todo eso, aunque eso no es la razón de que la ame. Eso es lo más lindo de todo, la amo, porque si, porque así debía ser, por su personalidad, por su energía, por su caracter, por todo lo que ella es. Nadie me había hecho sonreir como ella lo hace, nadie se había entregado a mi, como ella se entrega, nadie me amó nunca de esa manera, aunque tampoco la amo solo por eso. Como dije antes, la amo, porque así estaba pensado, porque nací para esa taréa, al menos así lo veo yo.

Así que hoy es un mal buen día, malo porque me encuentro mal, bueno, porque a pesar de ello soy feliz. Bueno, porque mi amada está durmiendo y puedo acompañarla en su sueño solo con pensar en ella. Allí es donde me gustaría estar ahora, metido en su cama, abrazado a ella, con los ojos cerrados, sin necesidad de soñar, porque mi sueño ya está a mi lado.

Que tengaís un maravilloso día, o al menos, que no os toque un estómago revuelto como el mío ;-)